El mundo hecho de terrones de azúcar

CRÍTICA a Oz un mundo de fantasía

TÍTULO ORIGINAL: Oz: The Great and Powerful

AÑO: 2013

DURACIÓN: 127 min.

PAÍS: EEUU

DIRECTOR: Sam Raimi

GUIÓN: Mitchell Kapner, David Lindsay-Abaire (Novela: L. Frank Baum)

MÚSICA: Danny Elfman

FOTOGRAFÍA: Peter Deming

REPARTO: James Franco, Mila Kunis, Rachel Weisz, Michelle Williams, Abigail Spencer, Zach Braff, Joey King, Bill Cobbs, Stephen R. Hart, Martin Klebba, Tony Cox, Otis Winston, Bruce Campbell, Ted Raimi, Tim Holmes, Toni Wynne, Rob Crites, John Paxton, William Dick

PRODUCTORA: Walt Disney Pictures / Roth Films

WEB OFICIAL: http://disney.go.com/thewizard/ 

Resulta evidente que la precuela de Oz se llevaría de calle en cuestión de técnicas visuales al musical de este cuento. Pero el exceso de imágenes a ordenador hace de esta película una aglutinación de dulzura que pica los dientes.

Con un comienzo bastante sencillo, modesto y bajo un humor muy tonto hace pensar que la película ha sido ideada para los niños y para que los padres que los acompañen no empiecen a resoplar nada más empezar. Aunque esa primera escena pueda resultar infumable para los niños. La llegada a Oz parece que hayan derramado el azucarero en la sala de montaje. Tratando de ver esta película con la mentalidad de un niño, es innegable que la película va a asombrar a cualquier niño y que saldrá dando botes del cine y molestará al resto de la sala con sus inocentes asombros. Afortunadamente no me topé con ninguno.

Aunque la película esté destinada a los más pequeños consigue engañar y tomar el pelo a los más mayores. En otras resulta vergonzosa. Unos efectos especiales de cuento de hadas que resultan excesivas. El reparto tampoco ayuda mucho. Unas interpretaciones excesivamente dulces y tiernas. Una Mila Kunis exageradísima (aunque bastante mona)

Por lo general se trata de una película entretenida y no del todo pesada. Quizá recalcar el exceso de escenas para mostrar las grandes habilidades de los técnicos de efectos especiales para mostrar los escenarios. No olvidamos que se trata de un cuento y que hay que saber situar los mundos fantásticos. ¡Pero hay que saber controlarse!. En cuanto a los personajes. Perfectos, noy nada negativo que decir. Muy sencillos a pesar de su apariencia y sin excesos. Los personajes computados también resultan sencillos, incluso para materializar a un mono volador parlante. Son encantadores y en ocasiones consiguen aparentar cierto realismo y humanidad. 

Lo mejor de la película es la batalla final. Una visión muy entrañable de lo que un poco de ingenio puede conseguir. Como moraleja de un cuento es digno de aplaudir. Dan ganas de dar un aplauso a todo el equipo durante tan elaborado trabajo.


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